Cuando alguien me pide recomendación sobre qué robot aspirador comprar, siempre les hago la misma pregunta: ¿Con qué presupuesto cuentas? Porque aunque muchos se extrañan al saber que puede haber tantas diferencias, lo cierto es que hay algunas sustanciales entre los modelos más caros y los más baratos: desde la forma en la que se desplazan por la casa hasta su eficiencia en la limpieza o los complementos con los que cuentan.
250 euros frente 1.500
Pongamos un ejemplo basado en la experiencia. Como referencia para el modelo económico he elegido la Conga 7290 Eternal Home X-Treme de Cecotec, con un precio que ronda los 250 euros y una de las opciones con mejor relación calidad-precio de su rango. En su hoja de especificaciones técnicas encontramos un sistema de navegación láser que escanea las estancias y crea un mapa para poder enviarlo a una habitación concreta, una potencia de aspiración de 2.500 pascales, ocho modos de limpieza y la posibilidad de pasar la mopa. Y, además, viene con una estación de vaciado automático que hace que no haya que limpiar el depósito de polvo manualmente cada vez que pasa por la casa; una característica poco común en modelos tan baratos.
Frente a él, uno de los aspiradores robot más caros del momento: Roborock S8 Pro Ultra —con un precio de aproximadamente 1.500 euros—, cuya base de vaciado tiene además dos tanques de agua (uno limpia y otro sucia) para fregar la mopa. A nivel técnico posee navegación LiDAR, una potencia de succión de 6.000 pascales, tecnología de fregado VibraRise 2.0 y cuatro modos de potencia (cinco, si solo se va a aspirar).
La mayor diferencia: el fregado
¿Qué supone esto a nivel práctico? En cuanto a la aspiración, y partiendo de la base de que el modelo económico que hemos elegido es uno de los que mejor rendimiento tiene cuando el presupuesto es bajo, la potencia del Roborock es mucho mayor. Así, deja menos residuos (sobre todo los más pesados, como las piedras pequeñas) en el suelo, y también consigue apurar mejor en bordes y las esquinas. Dicho esto, es importante tener en cuenta que estos resultados son más llamativos cuanto menos se pasa el aspirador: si se programa para que limpie a diario, las diferencias entre uno y otro en este aspecto pueden llegar a ser mínimas.
En la función de fregado las diferencias sí son importantes. Mientras los modelos económicos se limitan a pasar la mopa húmeda (muchas veces el suelo queda peor de lo que estaba) y no son capaces de discernir si hay una alfombra, los más avanzados sí sacan partido de esta función: sus mopas vibran, como en el caso de este Roborock, o presionan contra el suelo, restregando y eliminando las manchas. No es exactamente como pasar la fregona, pero se aproxima. Además, detectan las alfombras y son capaces de evitarlas o aspirarlas con mayor potencia, pero siempre levantando la mopa para que su superficie mojada nunca esté en contacto con ellas.
Otro dato importante: en un modelo económico que friega, cuando el robot vuelve a su base, la mopa debe quitarse y lavarse a mano (si se deja hay riesgo de que proliferen bacterias y mal olor); pero en uno con una base de vaciado como la de Roborock, además de vaciarse el depósito de suciedad se pone en marcha un sistema que lava la mopa y luego la seca, haciendo que no sea necesaria la intervención humana en ningún momento y eliminando los inconvenientes antes mencionados.
Navegación y opciones de la app
Por último, hablemos de la navegación y las opciones de la app. Ambos modelos ofrecen la posibilidad de crear mapas y enviar el robot a limpiar en determinadas habitaciones, así como de programar su funcionamiento. Hay sutiles diferencias –por ejemplo, que la app de Roborock permite ver en todo momento dónde está el robot, qué ha limpiado y qué le falta— pero no son demasiado importantes. En cambio, si hemos notado una mejor gestión de los obstáculos en el modelo caro, que los detecta con mayor precisión y esquiva mejor.
¿Hay entonces tantas diferencias como para justificar un desembolso que puede ser hasta 6 veces superior? Todo depende del uso que se le vaya a dar. Si se busca una limpieza básica de mantenimiento, no hay excesiva suciedad (por ejemplo por los pelos de mascotas) y se va a programar la limpieza de forma habitual, para la mayoría de usuarios será suficiente con un modelo más económico. En cambio, si lo que se busca es una limpieza más apurada que incluya también fregado y olvidarse por completo del robot, un coste mayor está justificado.
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