Michael Dumler, un fotógrafo estadounidense, viajó a Ucrania para documentar la guerra. Pero cuando llegó, dejó su cámara y se dedicó a satisfacer una necesidad más apremiante: entrenar a ucranianos comunes en combate.
La prisa por construir un ejército de ciudadanos y soldados contra el ejército ruso ha sido una característica definitoria del conflicto en Ucrania. Las naciones occidentales aliadas con Ucrania se han mostrado reacias a respaldar y financiar entrenadores extranjeros dentro del país, por temor a que pueda conducir a una escalada. En cambio, decenas de miles de tropas fueron enviadas a otras partes de Europa para recibir entrenamiento.
Pero en el video de opinión anterior, Dumler argumenta que el enfoque más práctico para capacitar a los ucranianos recién alistados es dentro de las fronteras de Ucrania. Y la necesidad es inmensa.
“Traer unos cuantos cientos de instructores más calificados no empeorará las cosas”, dice Dumler. “Simplemente salvará vidas ucranianas”.