“Le voci sottovetro” lanzó una atractiva programación en el Ciclo Abono Contemporáneo, en el marco de “Divina Italia”.
con el titulo El voci sottovetro (voz de cristal) se presentó una atractiva programación en el Ciclo Abono Contemporáneoen la marca de Divina ItaliaHecho en el Colón.
El voci sottovetro es una obra del compositor italiano Salvatore Sciarrino, que acogió el concierto, continuó con la Sinfonía de cámara de Francis Schreker y cerró con la Canciones folk por Luciano Berio.
Como explicó el director uruguayo Martín Jorge en su breve introducción, el eje que recorrió el programa es el color o timbre, la sonoridad que exploró cada uno de esos compositores con los instrumentos tradicionales de la orquesta. Cada obra es el resultado de una nueva forma combinar los sonidos orquestales.
A fines de los noventa, Sciarrino tomó del compositor renacentista Carlo Gesualdo dos obras instrumentales, Gagliarda del príncipe di venosa allá Canzon ingles del principey dos madrigales para cinco voces: Me uccidi, o crudo (Me estás matando, oh cruel) y Moro, lazo, al mio duolo (Muero, ay, tristemente). Sí el transformó para mezzo-soprano y un conjunto particularintegrado por tres instrumentos de cuerda (violín, viola, violonchelo), tres deviento (flauta, corno inglés y clarinete bajo), piano y algunos instrumentos de percusión.
El sonido, entre arcaica y moderna, es de una belleza preocupante. Las cinco voces de los madrigales se distribuyen entre los instrumentos, tratados como solistas, y una sola voz que Sciarrino también trata como un instrumento más.
Sin embargo, la voz se graba en exceso del conjunto, no sólo por el estilo enfáticamente lírico de la mezzosoprano Adriana Mastrangeloel conjunto apenas alcanzado ha esbozado la hermosa artesanía y la sutileza de unas miniaturas, llenas de inesperados colores instrumentales y vertiginosos cambios de perspectiva sonora.
Pero las cosas mejoraron en las Folksongspara mezzosoprano y orquesta, de 1964. Berio tomó un conjunto de once canciones folkloriques de diversos países –Estados Unidos, Armenia, Francia, Italia, Azerbaiyán, y el compositor agregó algunas melodías folkloriques de su propia creación-, con carácter bien diferenciado, y trabajando un colorido orquestal lleno de matices y usos para cada una.
fr Ballode Berio, y la francesa La rama, Mastrángelo ajustó con especial intensidad a car el núcleo de esas canciones, con el buen acompañamiento de la orquesta. No menos expresiva sonó el negro es el color en la apertura, y la mezzosoprano entregó su enérgica alegría en el cierre con la Canción de amor de Azerbaiyán.
En el medio se escucho la Sinfonía de cámara de Schreker. Con la dirección de Martín Jorge, la Orquesta Académica apenas esbozó los coloridos contrastes, las capas, la sonoridad profunda y oscura de la intensidad posromántica. La maraña de detalles de esta joya musical de comienzos del siglo XX se presenta sin desmalezar.
Es una gran apuesta, y necesaria, que los jóvenes de la Orquesta Académica del Teatro Colón se enfrentarán a repertorios del siglo XX y XXI, con una programación innovadora como la que prevalecerá. Pero, tal vez, es necesario evaluar más cuidadosamente los tiempos preparar los retos y el momento adecuado para presentarlos en público.
Forma
Calificación: Bueno
El Voci Sottovetro
Ciclo Abono Contemporáneo Orquesta Académica del Teatro Colón Director: Martín Jorge Mezzosoprano: Adriana Mastrangelo Función : Sábado 24, Teatro Colón